sábado, 8 de diciembre de 2012

"La pequeña Dorrit", de Charles Dickens


«Después de más de veinte años en China ("Tengo tan pocas raíces que me arrastra la corriente"), Arthur Clennam vuelve a Londres convencido de haber desperdiciado su juventud y de que ya ha pasado para él el momento del amor. Su madre, una anciana inválida y siniestra le recibe gélidamente en la habitación de la que lleva doce años sin salir, y en la que, al fondo, en la penumbra, cose una desventurada muchacha. Arthur se interesa en seguida por ella, sospechando que que puede guardar la clave de un vergonzoso secreto familiar que su madre le oculta, y descubre que se trata de Amy Dorrit, nacida en la cárcel de deudores de Marshalsea, donde su padre, uno de los más antiguos presos, es toda una institución...» (Sipnosis extraída de la editorial Alba Clásica Maior).

He de reconocer que conseguir esta obra de Dickens no ha sido nada fácil, principalmente, porque tras buscar durante mucho tiempo, solo me econtraba con ediciones en español que estaban descatalogadas... hasta que este año, con motivo del bicentenario del nacimiento del autor, han vuelto a publicarse algunas de sus obras, entre ellas, "La pequeña Dorrit".

En una entrada anterior, ya hice mención a una parte de esta novela (acerca del Negociado de Circunloquios), y con motivo de contextualizar el fragmento sobre el que escribí, incluí también un breve resumen del argumento de la misma. Sin embargo, esta gran obra se merece algo más que una simple mención.

"La pequeña Dorrit" se publicó por entregas mensuales del 1 de diciembre de 1855 al 1 de junio de 1857, y este mismo año en forma de libro, en un solo volumen. Es una novela compleja, pues en ella se entrecruzan diversas tramas y personajes, aunque todos ellos perfectamente conectados entre sí. No obstante, la trama principal se desarrolla alrededor de Amy Dorrit (la pequeña Dorrit) y Arthur Clennan, con la prisión de Marshalsea como telón de fondo y otro de los protagonistas indiscutibles de esta obra. 

La citada institución era una prisión a la que iban a parar aquellos deudores que no tenían fondos suficientes para cumplir con sus deudas, en la cual incluso podían residir sus familias. En la novela, Dickens hace una detallada descripción de la vida y rutinas del lugar, conteniendo elementos autobiográficos, dado que su propio padre fue uno de los reclusos. 

Amy Dorrit ha nacido y se ha criado en la prisión de Marshalsea, dado que su padre, un caballero venido a menos, ingresó en la misma (junto con su mujer y sus otros dos hijos, Fanny y Tip) por no poder hacer frente a sus deudas; el señor Dorrit es el recluso más antiguo de la prisión, convertido en casi una institución y en uno de los elementos más pintorescos del establecimiento penitenciario, siendo tal su relevancia que es conocido como el Padre de Marshalsea. 

La pequeña Dorrit  (Amy) se describe como una muchacha bastante menuda para su edad y de aspecto frágil (de ahí su apodo), abnegada, humilde, trabajadora y generosa, que a pesar de ser la menor de su familia, toma las riendas de la situación, manteniendo a su padre y a sus hermanos mayores. Ha crecido en la pobreza y, a diferencia del resto de su familia, no pretende aparentar poseer una posición social de la cual carece, lo cual conllevará más de un disgusto para su padre y su hermana, quienes nunca renunciarán a demostrar que proceden de una familia "noble". Personalmente, considero que es la única persona coherente en su familia, así como la verdadera piedra angular de su padre y sus hermanos.

Amy es contratada como costurera por la señora Clennam, quien lleva inválida y recluida en su habitación muchos años. Esta contratación no es nada casual, sino que a través de la misma se intenta reparar un daño cometido en el pasado. Es en casa de su madre, donde Arthur Clennam conoce a la pequeña Dorrit, el cual, compadeciéndose de la joven, decide hacer todo lo posible por ayudarla a ella y a su familia.

Arthur Clennam es un hombre de unos cuarenta años, que ha pasado más de la mitad de su vida en el extranjero con su padre, atendiendo a los negocios de la familia. Ha sido criado bajo una educación estricta, por una madre fría y severa, pero es un hombre con buenos principios y bondadoso, algo tímido y siempre presto a ayudar a un amigo. Tras la muerte de su padre, decide regresar a casa de su madre en Londres para intentar desvelar un secreto familiar, así como para comunicarle que desea abandonar el negocio familiar y establecerse por su cuenta; hecho que la señora Clennam no acepta de buen grado y el cual supone un mayor distanciamiento entre madre e hijo.

Esta novela se caracteriza, al igual que otras obras de Dickens, por contener una dura crítica a la sociedad de la época que se manifiesta, en este caso, en la pasividad e inmovilidad de las instituciones, representadas a través del llamado Negociado de Circunloquios y monopolizadas por la familia Barnacle (que en inglés significa "percebe"). La citada familia ocupaba todos los puestos de poder en el Gobierno y se esforzaba por conseguir que "las cosas se mantuvieran tal y como estaban" (si se me permite la expresión), impidiendo cualquier posibilidad de avance o cambio.

En "La pequeña Dorrit", Dickens realiza un gran trabajo con la descripción de los personajes, dotando a cada uno de ellos de una personalidad y carácter únicos, logrando crear simpatías y antipatías por ellos. Refleja una realidad dura y cruel sobre la sociedad de la época, grotesca en algunos aspectos y ridícula en otros muchos (principalmente, en relación con las clases altas y la importancia de aparentar). La historia contada en esta obra contiene todos los elementos necesarios para cautivar al lector: romance, secretos familiares, intrigas, unos grandes personajes... todo ello aderezado con una ácida crítica social e institucional.

La novela ha sido adaptada para la pequeña pantalla, en una serie de 14 capítulos de la BBC; como la mayoría de las producciones de la cadena británica, se caracteriza por su rigor en relación con la obra literaria, tanto respecto a los hechos y escenarios, como a la caracterización de los personajes. No quiero extenderme mucho más sobre la versión televisiva de "La pequeña Dorrit", simplemente me gustaría destacar los papeles de una casi desconocida Claire Foy (como Amy Dorrit), Matthew Macfadyen (como Arthur Clennam) y también una mención especial a Andy Serkis (el que hiciera de Gollum en el Señor de los Anillos), que interpreta en "La pequeña Dorrit" al señor Rigaud, un asesino francés; su actuación en este papel es bastante buena, pues consigue causar repelús con sólo verle aparecer en escena.

La única "pega" que podría ponerle a la adaptación televisiva es que no ha sido emitida en España (o al menos, yo no he conseguido encontrarla en español). Sin embargo, disfrutar de la misma en versión original merece (y mucho) la pena.

Un saludo.






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